Estábamos a punto de llegar al minuto 95 y los 5 minutos de tiempo añadido llegaban a su final. El colegiado, el valenciano Miralles, se encontraba alejado de esa jugada en la que Michel cae, debido a ese agarrón que no vio o no quiso ver.
Para muchos espectadores, desde la grada de tribuna, no dio sensación de penalti pero otros, los que se encontraban en la general y los situados en el fondo norte, si protestaron con más vehemencia porque ellos sí vieron la controvertida jugada que pudo haber cambiado el encuentro.
El colegiado valenciano no se complicó la vida y decidió señalar el final del encuentro ante las protestas generalizadas de los jugadores cartageneristas, que acabaría costando la tarjeta de Cristo, por protestar.
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