Si quisiera destacarlo que Andy Céspedes, el fotógrafo del club que antes lo fue de este digital mucho tiempo. Esta navidad ya me adelantó en la puerta del Corte Inglés, que la situación de entonces no la arreglaba nadie, ni la Charito de sus buenos tiempos. Craso error porque él estaba en lo cierto. “Mira Manolo, los veo entrenar a diario y te aseguro que este equipo no baja”. Pues bien, aquí te lo reconozco, como a Mikel Rico que también fue valiente cuando afirmó que este equipo no bajaría. No le conozco de nada para dudar de un caballero del fútbol, pero también llevaba razón.
Pero, sobre todo, si hay un culpable, un verdadero autor de todo lo que ha ocurrido esta temporada, ese se llama Julián Calero. Que ya lo dije en mi comentario anterior y ahora insisto en ello. Julián Calero es el responsable de todo lo bueno que le ha pasado al Cartagena en esta segunda vuelta y así hay que decirlo, porque lo que ha hecho el Efesé esta temporada no tiene parangón en la historia del fútbol nacional. Había que hacer números de ascenso en esta segunda vuelta y se hizo. Había que ser el mejor y se hizo. Y había que cambiar el equipo de la noche a la mañana y se hizo.
Así que miel sobre hojuelas, que bien está lo que bien acaba. Solo falta decir que estos éxitos perduren, y que, si Belmonte y Breis fueran inteligentes, que lo son, lo mejor que pueden hacer es vender al equipo, ahora que sigue en Segunda revalorizado.
Enhorabuena a todo el cartagenerismo del que me siento partícipe y feliz por el logro conseguido.